Restauradores de la localidad compiten por elaborar el mejor plato a partir de esta exquisita carne autóctona

La Escuela de Hostelería de Conil rezumaba esta mañana un olor especial a uno de los productos más señeros de la comarca de la Janda, como es la carne de Retinto. Producto kilómetro cero como ahora se denomina a los ingredientes de una ruta como la del Retinto que calienta motores con la celebración de un concurso gastronómico.

Más allá del que sea vencedor, destacan las ganas de seguir sorprendiendo, innovando y sobre todo, alcanzar la excelencia.

El Patronato de turismo de Conil, la asociación de jóvenes restauradores y el ayuntamiento de la localidad han vuelto a convocar a los amantes de la buena carne en torno a esta cita gastronómica.