El Síndrome del destronado hace referencia a aquel hijo que es tratado como un rey, generalmente el primero -y a veces es el primer nieto-, pero que al llegar un hermano debe compartir su trono
La llegada de un nuevo integrante a la familia es siempre una alegría. Sin embargo, a veces este momento especial puede transformarse en una situación de estrés para el más pequeño de la casa.
Pataletas, cambios de conductas y retrocesos en el aprendizaje, producto de los celos, son algunas de las formas en que se manifiesta lo que comúnmente se conoce como ‘Síndrome del príncipe destronado’.